Conforme pasan los días, las ordenes de “Distanciamiento social” y de “Quedate en casa” se siguen extendiendo y en algunos casos las restricciones son más severas. Estas medidas tomadas por las autoridades para la prevención y detención de la propagación del virus COVID-19 obligan a las personas  a estar en casa por mucho tiempo, a perder su rutina habitual, a reducir el contacto social y físico con los demás y en consecuencia han sufrido problemas de depresión, ansiedad, niveles altos de estrés y se han imcrementado los casos de violencia doméstica.

Cómo voy a sobrevivir?

Esta preocupación constante reina en los pensamientos frente al impacto financiero catastrófico y el impacto emocional ya golpea a millones de personas en el mundo que no salen del asombro, la negación y que ahora se preguntan ¿cómo voy a sobrevivir los siguientes meses sin trabajar o pagar mis deudas después que pase esta pandemia?, mientras que miles de personas en recuperación por alcohol o drogas temen por sus recaídas.

Por otro lado, muchos se han preocupado por difundir las medidas de prevención de contagio del virus, pero muy pocos se han preocupado por la salud mental de millones de personas que nos hemos visto obligados a interrumpir nuestras rutinas diarias. 

Otras muestras de cariño

Ahora el no dar un beso, no dar un abrazo o no visitar a un familiar de la tercera edad es una nueva muestra de amor, cariño y cuidado, sin embargo, conforme pasan los días y las semanas, la falta de socialización están estresando mucho más a las personas, y esto a la larga podría crear problemas graves de salud física y mental.

Algunas personas que estaban acostumbradas a manejar sus niveles de estrés con actividades sociales, deportivas y recreativas ahora enfrentan el reto de no poder hacer esas actividades por un tiempo, y no saben qué hacer asilados en sus casas para manejar el estrés de sus vidas, aún cuando hay opciones de qué hacer en casa el estar encerrados es una privación.

Enemigo oculto

Nosotros sabemos que cuando estamos frente a un peligro visual y presencial, la respuesta como mecanismo de defensa de nuestro cerebro es el de luchar o huir; pero la amenaza del COVID-19 hace más difícil el mecanismo de la respuesta porque no podemos verlo, oírlo, ni palparlo; haciendo que la angustia y desesperación sea mayor. De allí que muchas personas salieron desesperadamente a comprar compulsivamente alimentos, armas y municiones, para sentirse tranquilos y apaciguar su angustia. 

Como profesionales de salud mental, tendremos la ardua tarea y el enorme desafío de ayudar a las personas a mitigar el impacto emocional de esta pandemia. 

Recomendaciones que pueden ayudar a cultivar el bienestar mental durante la pandemia: 

1. Mantener un nivel de actividad física y mental que nos permita seguir una rutina saludable. 
2. El ejercicio es una de las cosas más importantes que se puede hacer para combatir el estrés de la cuarentena.
3. Salir a caminar o conectarse con la naturaleza (siguiendo las recomendaciones de distanciamiento social).
4. Leer, escribir, dibujar, pintar, tejer o cualquier afición que tenga o que le guste hacer para distraerse. 
5. Si tiene problemas con su pareja, trate de resolverlos de la mejor manera, enfocándose en el presente y evitando traer temas no resueltos del pasado.
6. Usar aceites esenciales o prender de vez en cuando una vela aromática pueden ayudar a reducir su sensación de estrés o ansiedad.
7. La cafeína es un estimulante que se encuentra en el café, té, chocolate y en las bebidas energizantes. Altas dosis pueden incrementar la ansiedad.
8. Haga un registro de lo que le estresa, y tome nota de las cosas por las que está agradecido.
9. Manténgase en contacto cibernéticamente con su red de amigos. Esto le dará una sensación de pertenencia y autoestima, lo que puede ayudarte en estos momentos difíciles.
10. Haga yoga, meditación, oración. Estas técnicas han convertido en un método popular para aliviar el estrés.
11. Practique la conciencia plena o mindfulness (como se le conoce en inglés), que describe prácticas que se enfocan en el momento presente. Esto puede ayudarle a combatir los efectos de los pensamientos negativos que inducen al estrés y la ansiedad.
12. Escuchar música puede tener un efecto relajante en el cuerpo, la música instrumental lenta puede inducir una respuesta de relajación al ayudar a reducir la presión arterial y el ritmo cardíaco, al igual que las hormonas del estrés.
13. Si tiene una mascota, pase tiempo con él o ella. Esto le puede ayudar a reducir el estrés y mejorar su estado de ánimo.
14. Evitar quedarse en pijama o ropa de cama todo el día, evitar sobreexponerse a las noticias. 
15. Evite gastar dinero innecesariamente. Establezca un plan de pago con sus proveedores de bienes y servicios; y si tiene que trabajar desde casa, establezca su propio horario de trabajo y arréglese como cuando sale a trabajar, y recuérdeles a sus hijos que ellos ni usted están de vacaciones. 
16. Por ultimo tenga en cuenta que su estado de ánimo positivo la ayudará a que su sistema inmune le proteja. Está demostrado que los pensamientos negativos deprimen su sistema inmune y lo vuelve débil frente a cualquier virus.

Ejercicio mental necesario

Es importante que aprenda a identificar sus pensamientos perturbadores o ansiosos, pero no les preste atención. Por ejemplo, decirse a sí mismo/a: “Te escucho, pero no estoy dispuesto a prestarte atención en este momento”.

Finalmente recuerde que distanciamiento social no es lo mismo que distanciamiento emocional y que toda crisis es una oportunidad para elevar nuestro nivel de resistencia emocional. ¡Después de la tormenta viene la calma, la alegría, la felicidad, la esperanza, y la paz!. Mantengamos el optimismo y la enseñanza ante esta nueva amenaza. Y cuidado que muchas veces se sufre más con lo que se imagina que con lo que realmente sucede.