A medida que se va acercando el cierre de año cada vez es mayor el número de personas que hablan del final de una nueva década y el comienzo de otra. Aunque existe cierta controversia si cada década comienza en un año acabado 0 o en 1 y termina en un año acabado en 9 o en 0, pero eso se lo dejamos a los matemáticos y astrónomos. De cualquier manera, cada año que empieza es un buen pretexto para hacer nuevos planes y proponer resoluciones para el año que viene, y esto es positivo, mientras no se caiga en la trampa de hacer propuestas y compromisos que luego termine frustrado/a como años anteriores. Ahora el desafío podría ser diferente porque empezaríamos una nueva década, la de los veintes.
En primer lugar, creo que el fin de una década y la llegada de una nueva, es una excelente oportunidad hacer una evaluación de cómo le fue durante estos diez años que terminamos y a la vez una ocasión para fortalecer compromisos y plantear nuevas metas de lo que se quiere seguir logrando en las diferentes dimensiones de la vida relacionados con el bienestar personal, como: Salud (física y mental), afectivo, espiritual, laboral, familiar, económico, económico, etc.
Una vez identificadas las áreas en las que desea trabajar y fortalecer, se debe plantear en cada una de ellas metas claras, precisas y realizables; no importa qué, o qué tan difícil puedan parecer; lo importante es la motivación personal y que cada una de éstas metas tengan tiempo determinado, porque de lo contrario tienden a perderse o quedar en el olvido y llegará al fina de la década de los veintes con las mismas intenciones que al inicio de la década, y sentirse terriblemente frustrado/a.
Cualquiera sea el objetivo que se desee lograr, se debe empezar a trabajar desde el inicio, basándose en un plan y enfocándose en cada una de esas áreas que se ha planteado con un plan claro, no importa que tan inalcanzables o irrealizables parezcan al inicio; sólo necesita dar los primeros pasos y los resultados los irá viendo en el proceso.
El optimismo es clave fundamental para alcanzar las metas, pues esto lo alentará a seguir adelante enfocándose en lo que quiere lograr y en dónde quiere verse al final de la década que viene.
Aquí algunas ideas que le pueden ayudar con el planteamiento y logro de sus resoluciones para la década de los veinte y que estas no que terminen en una frustración más en sus vidas:
• Entender claramente cada resolución y área en la que quiere trabajar o mejorar. Escríbalo, haga un plan para cada una de ellas, y ponga tiempo definido para cada paso importante que tiene que dar.
• Visualice lo que quiere lograr y siéntase motivado/a en cada momento del proceso.
• Su resolución tiene que ser realista de alcanzar, para no desalentarse, o sentirse frustrado de no lograrlo.
• Piense acerca de los recursos que necesita e identifique con cuales cuenta para tratar de alcanzar sus metas.
• Si en el proceso encuentra algunas dificultades, no se desaliente o sienta frustrado/a, utilice su creatividad para cambiar de estrategia y seguir adelante.
• Utilice el tiempo adecuadamente para cada uno de sus resoluciones y áreas a trabajar.
Finalmente recuerde que cualquier cambio que valga la pena en su vida, siempre requiere de un esfuerzo constante y perseverancia. Las soluciones fáciles, los atajos, las fórmulas mágicas no dan resultados duraderos. Sólo las acciones concretas, la disciplina y responsabilidad pueden mejorar su vida, y lograr así que sus resoluciones no terminen en frustraciones.
Muchas gracias por ser lector de esta página y que tenga un grandioso inicio de una nueva década!!!!